**Romero Serrano, incurre en una prevaricación.
RODERICK GARCÍA RAMÍREZ
Larga fue la sesión del Consejo Universitario de la BUAP, que anunció una movilización nacional para pedir el apoyo de universidades públicas, Diputados locales y federales, Senadores, la ANUIES y la federación, en aras de defender la autonomía y prestigio de la institución, así como la sucesión rectoral en 2021.
En la sesión estuvieron presentes el Rector Alfonso Esparza Ortiz y el Tesorero Oscar Gilbón Rosete, quienes escucharon la postura del pleno del Consejo Universitario que, de forma unánime, condenó las amenazas a su autoridad; la violencia del poder público contra la institución; la persecución abierta del gobierno de Miguel Barbosa Huerta; las mentiras del Auditor Superior del Estado, Francisco Romero Serrano que sabe perfectamente que no tiene facultades para auditar a la BUAP en su presupuesto federal e ingresos propios.
“Romero Serrano, está incurriendo en una prevaricación y eso se debe denunciar. Es un delito grave”, refirieron Consejeros.
La universidad no es un botín ni está sujeta a caprichos o consignas que manchan su honor. “No hay autoridad moral para proceder de esa forma”, advirtieron los Consejeros que se fueron turnando en el uso de la palabra.
Advirtieron que las denuncias del Auditor son irracionales, pues no existe contrato alguno con ninguna empresa. “No tiene pruebas para denunciar si nunca ha auditado a la BUAP; él forma parte de la brutalidad judicial; ha pisoteado los derechos humanos. Quisiera el Estado que hubiera sumisión y orfandad”.
Después de dar a conocer que es el Despacho DEGAZA Internacional Consultas S.C., el encargado de auditar de manera externa a la BUAP, comprobado su prestigio, su registro ante la función pública estatal y federal, su experiencia, su propuesta técnica, económica y profesional, los Consejeros, señalaron que tienen en puerta tres elecciones: Las de autoridades de escuelas y facultades, los propios Consejeros y la sucesión de Rector.
Acordaron por unanimidad extender el comodato por 30 años de las casas de estudiantes.
Asimismo, dijeron que la auditoría Superior de la Federación ha auditado a la BUAP y no ha habido problemas. Por eso es falso el discurso del Auditor Romero Serrano, pues nunca hubo de su parte revisión a la universidad, como argumenta. Es evidente la corrupción que quiere imponer atentando contra la soberanía universitaria.
Quería la renuncia del Rector Esparza, luego lo amenazó, terminando por utilizar a medios de comunicación filtrándoles información que utilizó para denunciar penalmente, justificando su pobre actuación.
“No estás solo”; “no es la primera vez que enfrentas la persecución”; “es un abuso de autoridad y leyes violentadas”, fue el grito a favor del Rector Esparza al término de la sesión ordinaria.
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