Con los millones de pesos que ha ganado Carlos Loret de Mola alquilándose de apologista de Vicente Fox, Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto y respetando hasta la saciedad a Carlos Salinas de Gortari, debería retirarse del oficio de mercenario del periodismo para no seguir arrastrando su casi nula credibilidad y lo que le queda de decencia, si alguna vez la tuvo.
Ahora, le da por atacar al gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, diciendo que ejercita el nepotismo a través de su hijo Alejandro Armenta Arellano, inventando que cobra, es funcionario y creó su propia empresa.
“Miente, Loret”.
Alejandro Armenta Arellano es asesor honorario, no cobra un peso y nada le impide tener su propia empresa. Él, estudió ingeniería en robótica y sabe mucho de tecnología.
La ignorancia de Loret lo llevó a no poder ocultar el montaje del caso Florence Cassez, junto con su amigo Genaro García Luna, preso hoy en Estados Unidos; tampoco ha podido tapar las casas y terrenos que tiene con su esposa; mucho menos el dinero que recibe por atacar a todo lo que huela a cuarta transformación, siendo patrocinado por Roberto Madrazo y sus hijos y, de pilón, Felipe Calderón.
El comportamiento aberrante de Carlos Loret de Mola, “Lord Montajes”, le hace ganar con honores el PREMIO PINOCHO, por mentiroso.
